Himno Kolping

Era un joven zapatero
Sacerdote se formó
Para unir comunidades
Y formar plena amistad

Padre Kolping vivirá (se repite)

Para este mundo mejorar
Vamos ya a realizar
Nuestra vida unida a religión
Al trabajo y recreación

Padre Kolping vivirá (se repite)

Familia santuario del hogar
Necesitamos preservar
Sociedad un bien común mayor
Con justicia un bien mejor

Padre Kolping vivirá (se repite)

Cantemos con mucha alegría
Reunidos este día
Somos mucha gente en acción
Juntemos manos y corazón

Padre Kolping vivirá (se repite)

Oración de la Familia Kolping

Señor Jesucristo
Tú le diste a la Iglesia la misión
de anunciar tu mensaje
y de ponerlo en práctica.

Te damos gracias por la confianza
que has puesto en los hombres.

Te damos gracias por el hombre Adolfo Kolping,
que es nuestro ejemplo
en el cumplimiento de esta misión.

Danos los mismos dones
con los que él quiso marcar su obra:
Fe y confianza en nosotros mismos,
seriedad en la vida y alegría,
responsabilidad y solidaridad,
conciencia de nuestra historia
y voluntad para progresar.

Danos fuerzas de fe
para que no nos escondamos
ante el mundo y sus desafíos.

Despierta en nosotros la esperanza,
para que sembremos la alegría
allí donde nos comprometemos con los hombres.

Consolida nuestro amor,
para que conscientes de
nuestra responsabilidad,
participemos en el desarrollo de la Iglesia
y de una sociedad verdaderamente humana.

Así nuestra comunidad en la Obra Kolping
será un comienzo de tu reino venidero.

Amén

Oración por la canonización del Beato Adolfo Kolping

Dios todopoderoso y eterno
Tú nos has dado al Beato Adolfo Kolping
como intercesor, guía y modelo.
Su vida estuvo colmada de la preocupación
por los jóvenes que padecían necesidad religiosa y social.
Para muchos fue un infatigable pastor de almas,
consejero paternal, maestro paciente y amigo fiel.

El nos dio un testimonio ejemplar del amor a Tu Hijo.
Su fidelidad a la Iglesia es un modelo para nosotros.
Su gran inquietud era que se concibiera el trabajo,
la familia y la sociedad a la luz de nuestra fe.
Consideraba que la ayuda mutua en la comunidad

era la puesta en práctica de la caridad cristiana.

De las Sagradas Escrituras, De los Sacramentos,
y de la oración sacaba fuerzas para crear una obra
que debía servirte a Ti y a los seres humanos.

En todos los tiempos nos has convocado a colaborar
en la construcción de Tu Reino. Por eso te pedimos:
Danos valor y fuerza para contribuir hoy a la lucha
por la superación de la pobreza, de la injusticia y de la desesperanza.
Ayúdanos, por la intercesión del Beato Adolfo Kolping,
a comprometernos con valentía a favor de la vida humana,
de la protección del matrimonio y de la familia.
Conviértenos en sal de la tierra y luz del mundo en la comunidad
de tu Iglesia y de la Obra Kolping Internacional.

Cumple nuestra esperanza de poder venerar –
en comunión con toda la Iglesia, en todos los idiomas
y en todas las naciones, a Adolfo Kolping como Santo.
Anímanos a aportar lo nuestro para lograr la perfección
de tu Reino en este mundo, a través de la fe, la esperanza y el amor,
tal como lo hizo Adolfo Kolping.

Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor

-Amén